EL correo ilustrado
Estoy sorprendido de ver la cantidad de accidentes relacionados con minibuses y de la forma en que los políticos, del partido que sean, se quedan callados al respecto; como si se tratara de lo más normal.
El viernes por la tarde me entero que un chofer ebrio de la ruta 258 estrella su unidad contra un semáforo en Federación y la Calzada Independencia, lo que ocasiona que una niña de 11 años resultara lesionada; por cierto, el conductor iba tomando tequila con coca y dijo que “el semáforo venía a exceso de velocidad y en sentido contrario”. ¡Qué patético!
El domingo, otro señor resultó con fractura de piernas y cadera luego de ser arrollado por un minibús de la ruta 333. Ese chofer llevaba apenas cuatro pasajeros, según dijo el reportero, porque acababa de empezar su turno; ¿Qué sería si hubiera ido cansado…?
El lunes (hoy) en la mañana, escucho que otro minibús de la ruta 622 choca contra un Mazda y resulta lesionada una joven.
De plano, es el colmo con esta situación, y lo más sorprendente es que aquí no hay político que diga: ¡Ésta boca es mía!
Allí es donde las autoridades deberían apretárselos e intervenir de verdad con.…ganas.
Allí es donde deberían hacer plebiscito para ver si queremos que quiten a todos esos choferes que sólo ocasionan accidentes, en lugar de perder tiempo en otras cosas.
Ing. Heriberto Reyes Gutiérrez